Instrumentos
La Sección de Instrumentos nace en 1961. En poco más de 25 años, los 16 hermanos iniciales que conformaban la sección se habían convertido en 150, y su auge hizo que en 1992 se encargara a la Cofradía organizar el concurso y exaltación de instrumentos de la Semana Santa zaragozana. La Sección ha seguido creciendo de manera impresionante.
TamborEl tambor nos acompaña desde la creación de la Sección de Instrumentos en 1962. Es el instrumentos más común entre nuestras filas y el que más Hermanos eligen para procesionar. Es el instrumento que más ha cambiado con el paso de los años, dejando atrás la madera y la piel y evolucionando hasta materiales como el carbono, el aluminio o el titanio. En números aproximados el 65% de nuestra Sección está formada por tambores.
TimbalEl timbal también nos acompaña desde la fundación de la Sección. Aunque en la actualidad comparte protagonismo con el bombo en los primeros años de vida de la Sección acompañaba en solitario a los tambores. En la actualidad lo tocan mas de 35 Hermanos de la Sección.
BomboEn 1972 incorporamos a nuestra Sección de Instrumentos el sonido del bombo. Aún estando en clara inferioridad numérica respecto al tambor en pocos años fue capaz de dejar su huella en nuestros sonidos y ha llegado a convertirse en la seña de identidad de nuestra Sección. Junto con el timbal, apenas ha evolucionado en su fisonomía, utilizándose los mismos materiales en su construcción que hace 40 años, aunque eso sí, algo más ligeros.
CornetaEn 1986 se funda el Piquete de Honor de nuestra Cofradía, y con el incorporamos un nuevo instrumento a nuestras filas, la corneta. En estos momentos este grupo cuenta con diferentes tipos de cornetas como las de llave y las de pistón, que les permiten interpretar marchas que en sus orígenes no eran posibles. En estos momentos más de 20 Hermanos tocan este instrumento en procesión.
TimbaletaLa timbaleta es el último instrumento en llegar a nuestra Sección de Instrumentos. Fue en 2001 cuando en el Piquete de Honor se decantó por este instrumento para darle más solemnidad a sus toques.
Sonidos del Calvario
Redobles de tambores, timbales y bombos, junto a toques de cornetas, son los acompañamientos sonoros que nos llegan al alma, que embellecen la plasticidad de nuestras imágenes y que nos acompañan en nuestros rezos y oraciones cuando procesionamos a Jesús camino del Calvario.
Desde el año 1939 nuestras procesiones han contado con acompañamiento musical. Primero fueron las bandas musicales del Hogar Pignatelli y la Diputación Provincial de Zaragoza, posteriormente nos acompañaron diferentes bandas militares. Pero todo ello cambió con la aparición de tambores y timbales en 1962, lo cual marcó una nueva etapa donde los sonidos los aportamos con devoción los cofrades de Jesús Camino del Calvario. Sobre esos sonidos que ofrecemos con sentimiento tratan estas líneas.
Durante los años que corresponden a las décadas de los años 1960 / 1970 / 1980 nuestros sonidos fueron calcados a las marchas que se tocaban en el Bajo Aragón. A este tipo de marchas corresponde la que conocemos como Himno –suele tocarse en la calle Manifestación antes de llegar a la Plaza de Santa Isabel– y también es conocida como la gallega; igualmente, corresponden a esta época las marchas conocidas como “Un Golpe”, “Cuatro Golpes”, “Chorizo” y “Gordo y flaco”. Todas ellas son marchas caracterizadas por su lentitud. Así durante los años 70, nuestras marchas salieron de las ideas de Francisco Gómez, Gregorio Lasheras, José Luis Sanjuan y Manuel Rodríguez. Estas marchas empezaron a cambiarse a lo largo de los 80, cuando tomando como base o modelo las marchas del Bajo Aragón empezamos a crear marchas propias; de esa época debemos reconocer la labor de Ángel González Misis.
Pero no será hasta los años 90 cuando un grupo de hermanos, donde llevaba la batuta Fernando Reig Guillén junto a Pedro Ordovás, Pedro A. Hernando, Miguel Martín, Ricardo Marzo, Julián Laclaustra y Antonio Serón, empiezan a componer marchas para la Sección de Instrumentos, sustituyendo las marchas antiguas. De esta forma nacen piezas como la Salida de Santa Engracia –si bien ésta fue modificada al decidir que la Sección de Instrumentos saldría desde dos calles (Don Hernando de Aragón y Tomas Castellano)– o la de Cierre en Santa Engracia. Posteriormente en 2008 la marcha de salida de Santa Engracia fue recompuesta para poder salir la sección desde el interior de la Basílica, obra de David Gómez. También nace la marcha conocida como San Cayetano para cerrar nuestra procesión en el templo del mismo nombre tras el Santo Encuentro. Todavía se compusieron, aunque hoy en día no se tocan, las marchas “Crash”, “Safri Duo” y la conocida como “Lenta a tres partes”.
En esa década de los noventa también se componen marchas como Queen, Ecuador, Pata Fú, Manifestación y Parabata; sin olvidar que en esta época se incorpora al repertorio de todas las cofradías de la semana santa zaragozana la marcha “Zaragoza”.
A mediados de la década de los 90 se compusieron marchas para entrar y salir de la Plaza del Pilar durante el acto del Encuentro, con motivo de la consolidación de este acto en el magnífico espacio de la Plaza de las Catedrales.
La aparición de la procesión de las tres Caídas y su desarrollo en Carmelitas no conllevó ninguna marcha específica; sin embargo su traslado a la bandeja de la Iglesia de Santiago supone la aparición en 2007 de las marchas “Santiago” y “6 en 1” para ser tocadas al llegar al citado templo pasando por el Arco de San Ildefonso. Estas son las primeras composiciones de la siguiente generación de hermanos que introduce cambios sustanciales en nuestros sonidos (se dejan de tocar las marchas de “preguntar” y “contestar” para volver a tocar todos juntos). Entre otros muchos se encuentran Alberto Guillén, Rafael Blasco, Miguel López, Íñigo de Lui, Carlos Catalán y David Gómez.
No podemos dejar de mencionar que a principios de la década del 2000, los bombos tocaron una marcha “solo bombos” en la calle Alfonso por el 25 aniversario de la introducción de este instrumento en la Cofradía.
El celebradísimo año del 2008 dio pie para aportar nuestro granito de arena a la celebración del bicentenario de los sitios con la marcha “2008”. En 2009 se compone la marcha “Calvario” para entrar en San Cayetano bordeando la plaza de San Cayetano en dos secciones. Un año después, la Sección decide homenajear a Fernando Reig por su labor en la composición de muchas de las marchas que tocamos en la actualidad componiendo la marcha “Fernando Reig”.
El 50 aniversario de la sección en 2011 supone la aparición de una marcha conmemorativa, la denominada “Aniversario”, en la que participaron en su composición la mayoría de los jefes de instrumentos y delegados de la Sección desde la fundación de la misma. Con ese mismo motivo se editó un CD donde se recopilaron parte de todas estas marchas.
Sonidos del Piquete
Los inicios del piquete se remontan a la década de los 80, cuando un grupo de hermanos (José Manuel Tirado, Gregorio Lasheras, Manolo Rodríguez, Juan Pérez Estella y alguno más) se deciden a tocar la corneta y en principio, al parecer, estaban las cornetas solas, es decir, sin tambores. Se les ponía en cabeza de la Sección y su misión era tocar “Atención” y “Silencio” es decir, anunciar el comienzo y la finalización de las marchas de la Sección. También, se solía tocar alguna marcha (el Tito Pajarito, la Sencilla, etc.) que era acompañada en “Lenta” por la Sección. Pero es a partir del año 1985, cuando los hermanos deciden y solicitan a la Junta de Gobierno la formación de un piquete al uso como el que ya tenían otras cofradías, y así, con la aprobación de la Junta de Gobierno, se forma el mismo y se van creando, poco a poco y con toda la ilusión del mundo, marchas nuevas y específicas para el Piquete. En un principio se adaptan algunas de las marchas que se tocaban en el Piquete de la Junta Coordinadora de Cofradías, del cual ya formaban parte cuatro cornetas y algún tambor y timbal (el Ave María, la Macarena, la Soledad y alguna más); pero con el paso de los años el Piquete fue cogiendo volumen y ello trajo consigo que sus miembros tuvieran nuevas ideas, saliendo a la luz nuevas y cada vez más elaboradas marchas, las cuales eran presentadas a su vez a los tambores del Piquete para que éstos sacaran la percusión correspondiente. Así surgieron marchas como la de “Arturo” en recuerdo a nuestro hermano teniente ya fallecido, Arturo Traid, “Querubines” y más recientemente la versión para piquete del Himno de la Cofradía que habitualmente se toca cuando encerramos en Santa Engracia.
En la actualidad, se están preparando y ensayando varias marchas adaptadas a la nueva situación que supone la salida a las calles de Zaragoza de la peana.
Redobles de tambores, timbales y bombos, junto a toques de cornetas, son los acompañamientos sonoros que nos llegan al alma, que embellecen la plasticidad de nuestras imágenes y que nos acompañan en nuestros rezos y oraciones cuando procesionamos a Jesús camino del Calvario.
Desde el año 1939 nuestras procesiones han contado con acompañamiento musical. Primero fueron las bandas musicales del Hogar Pignatelli y la Diputación Provincial de Zaragoza, posteriormente nos acompañaron diferentes bandas militares. Pero todo ello cambió con la aparición de tambores y timbales en 1962, lo cual marcó una nueva etapa donde los sonidos los aportamos con devoción los cofrades de Jesús Camino del Calvario. Sobre esos sonidos que ofrecemos con sentimiento tratan estas líneas.
Durante los años que corresponden a las décadas de los años 1960 / 1970 / 1980 nuestros sonidos fueron calcados a las marchas que se tocaban en el Bajo Aragón. A este tipo de marchas corresponde la que conocemos como Himno –suele tocarse en la calle Manifestación antes de llegar a la Plaza de Santa Isabel– y también es conocida como la gallega; igualmente, corresponden a esta época las marchas conocidas como “Un Golpe”, “Cuatro Golpes”, “Chorizo” y “Gordo y flaco”. Todas ellas son marchas caracterizadas por su lentitud. Así durante los años 70, nuestras marchas salieron de las ideas de Francisco Gómez, Gregorio Lasheras, José Luis Sanjuan y Manuel Rodríguez. Estas marchas empezaron a cambiarse a lo largo de los 80, cuando tomando como base o modelo las marchas del Bajo Aragón empezamos a crear marchas propias; de esa época debemos reconocer la labor de Ángel González Misis.
Pero no será hasta los años 90 cuando un grupo de hermanos, donde llevaba la batuta Fernando Reig Guillén junto a Pedro Ordovás, Pedro A. Hernando, Miguel Martín, Ricardo Marzo, Julián Laclaustra y Antonio Serón, empiezan a componer marchas para la Sección de Instrumentos, sustituyendo las marchas antiguas. De esta forma nacen piezas como la Salida de Santa Engracia –si bien ésta fue modificada al decidir que la Sección de Instrumentos saldría desde dos calles (Don Hernando de Aragón y Tomas Castellano)– o la de Cierre en Santa Engracia. Posteriormente en 2008 la marcha de salida de Santa Engracia fue recompuesta para poder salir la sección desde el interior de la Basílica, obra de David Gómez. También nace la marcha conocida como San Cayetano para cerrar nuestra procesión en el templo del mismo nombre tras el Santo Encuentro. Todavía se compusieron, aunque hoy en día no se tocan, las marchas “Crash”, “Safri Duo” y la conocida como “Lenta a tres partes”.
En esa década de los noventa también se componen marchas como Queen, Ecuador, Pata Fú, Manifestación y Parabata; sin olvidar que en esta época se incorpora al repertorio de todas las cofradías de la semana santa zaragozana la marcha “Zaragoza”.
A mediados de la década de los 90 se compusieron marchas para entrar y salir de la Plaza del Pilar durante el acto del Encuentro, con motivo de la consolidación de este acto en el magnífico espacio de la Plaza de las Catedrales.
La aparición de la procesión de las tres Caídas y su desarrollo en Carmelitas no conllevó ninguna marcha específica; sin embargo su traslado a la bandeja de la Iglesia de Santiago supone la aparición en 2007 de las marchas “Santiago” y “6 en 1” para ser tocadas al llegar al citado templo pasando por el Arco de San Ildefonso. Estas son las primeras composiciones de la siguiente generación de hermanos que introduce cambios sustanciales en nuestros sonidos (se dejan de tocar las marchas de “preguntar” y “contestar” para volver a tocar todos juntos). Entre otros muchos se encuentran Alberto Guillén, Rafael Blasco, Miguel López, Íñigo de Lui, Carlos Catalán y David Gómez.
No podemos dejar de mencionar que a principios de la década del 2000, los bombos tocaron una marcha “solo bombos” en la calle Alfonso por el 25 aniversario de la introducción de este instrumento en la Cofradía.
El celebradísimo año del 2008 dio pie para aportar nuestro granito de arena a la celebración del bicentenario de los sitios con la marcha “2008”. En 2009 se compone la marcha “Calvario” para entrar en San Cayetano bordeando la plaza de San Cayetano en dos secciones. Un año después, la Sección decide homenajear a Fernando Reig por su labor en la composición de muchas de las marchas que tocamos en la actualidad componiendo la marcha “Fernando Reig”.
El 50 aniversario de la sección en 2011 supone la aparición de una marcha conmemorativa, la denominada “Aniversario”, en la que participaron en su composición la mayoría de los jefes de instrumentos y delegados de la Sección desde la fundación de la misma. Con ese mismo motivo se editó un CD donde se recopilaron parte de todas estas marchas.
Sonidos del Piquete
Los inicios del piquete se remontan a la década de los 80, cuando un grupo de hermanos (José Manuel Tirado, Gregorio Lasheras, Manolo Rodríguez, Juan Pérez Estella y alguno más) se deciden a tocar la corneta y en principio, al parecer, estaban las cornetas solas, es decir, sin tambores. Se les ponía en cabeza de la Sección y su misión era tocar “Atención” y “Silencio” es decir, anunciar el comienzo y la finalización de las marchas de la Sección. También, se solía tocar alguna marcha (el Tito Pajarito, la Sencilla, etc.) que era acompañada en “Lenta” por la Sección. Pero es a partir del año 1985, cuando los hermanos deciden y solicitan a la Junta de Gobierno la formación de un piquete al uso como el que ya tenían otras cofradías, y así, con la aprobación de la Junta de Gobierno, se forma el mismo y se van creando, poco a poco y con toda la ilusión del mundo, marchas nuevas y específicas para el Piquete. En un principio se adaptan algunas de las marchas que se tocaban en el Piquete de la Junta Coordinadora de Cofradías, del cual ya formaban parte cuatro cornetas y algún tambor y timbal (el Ave María, la Macarena, la Soledad y alguna más); pero con el paso de los años el Piquete fue cogiendo volumen y ello trajo consigo que sus miembros tuvieran nuevas ideas, saliendo a la luz nuevas y cada vez más elaboradas marchas, las cuales eran presentadas a su vez a los tambores del Piquete para que éstos sacaran la percusión correspondiente. Así surgieron marchas como la de “Arturo” en recuerdo a nuestro hermano teniente ya fallecido, Arturo Traid, “Querubines” y más recientemente la versión para piquete del Himno de la Cofradía que habitualmente se toca cuando encerramos en Santa Engracia.
En la actualidad, se están preparando y ensayando varias marchas adaptadas a la nueva situación que supone la salida a las calles de Zaragoza de la peana.
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